¿No sigue el mismo calvorota con pijamas estrafalarios abriendo la puerta?

Parece el chino grande que salía en las películas de James Bond 007.

Después de mucho tiempo he vuelto a hacer una visita a ver que se cocía. Hay dos chicas solas sin nadie más en el piso: Yuyu y Mónica. Me abrió la puerta Yuyu y no pude ver a la otra moza, pero según su amiga hace absolutamente de todo.

Súper maja conmigo como la otra vez. Le encanta que jueguen con sus pechos, se moja muchísimo si le trabajas la panocha y las tetas simultáneamente.

Como anécdota comentar que en este piso tienen una habitación dónde reciben, más otras dos dónde duermen las chicas y tienen todos sus enseres. Pues bien, mientras estaba trabajándome a Yuyu llegó otro cliente, a la otra chica por lo que pude escuchar con mi mandarín básico se ve que no le gustó demasiado el paisano y no se fiaba, por lo que le pidió a Yuyu un cambio de habitación hablándole desde detrás de la puerta. Corte de rollo total cuando la tenía a punto. Cogió mis bártulos y me llevó a su cuarto, mucho mejor que la habitación anterior. Como hacía algo de frío, sacó un edredón del armario, me lo echó por encima, se enfundó conmigo en la cama para abrazarme cual koala y seguimos al lío. Esta chica me trata como si fuera su novio.
El Problema vino cuando de allí a un rato empezamos a escuchar unos gritos muy agudos de dolor, seguidos de sollozos y un "¡para, para, para!". Se me queda mirando cariacontencida. Ahí empecé a mosquearme con el paisano de la habitación de al lado. Por fortuna la cosa no fue a mayores, tranquilicé a Yuyu y seguimos a lo nuestro.

Hay mucho animal que no sabe como tratar a una mujer en la cama, cosa que me pone de muy mala hostia. Cuando me voy de lumis quiero relajarme y disfrutar, lo último que uno espera es verse en la tesitura de tener que sacar a otro fulano a rastras porque no sabe comportarse, lo cual no me hubiera costado nada con este tipo en particular como pude comprobar más tarde.

Resumiendo, encuentro muy bueno salvo por ese detalle que casi me fastidia el día.

Puedes aportarnos edades y físicos ?.

Yuyu tiene 33. Cara agradable de nariz chata, pelo largo lacio castaño y ojos oscuros. Debe medir algo menos de 1.60m. Está algo rellena sin colgajos, pecho pequeño blandito, con culo y piernas agradables al tacto. Tiene donde agarrar. Lleva mocho entre las piernas sin ser exagerado. Es estrecha y cuando está excitada tensa los músculos de forma involuntaria, tiene la vagina muy en forma. Al menos conmigo cuando la pongo caliente me suplica que la folle, buscando correrse activamente. Si le comes las tetas estando ella encima se vuelve loca.

A ver si vuelvo e intento tirarme a la otra sin interrupciones.

Esta semana volví para ver si me cuadraba con la otra. Me volvió a abrir Yuyu y entre risas me preguntó si quería cambio. Después me enteré que quería que me tirase a su amiga para que "me probara".

Mónica es una mujer que debe andar sobre los 40 años, pelo largo negro recogido en una coleta, cara agradable, se le nota el paso del tiempo aunque de joven debió ser bastante guapa. Físicamente es lo opuesto a Yuyu, espigada con cuerpecito de teen, debe superar el 1.70m, muy delgadita, muy poco culo y pecho mediano bonito, algo caído pero agradable al tacto, se empitona fácilmente, piel muy suave y poco vello púbico. También es estrecha como su amiga, pero no tiene tanta fuerza en la vagina ni se moja igual, tuve que aplicarme para que se humedeciera a mi gusto ya que odio los lubricantes. Por la contra es muy flexible y manejable a pesar de la estatura. De carácter tranquilo y muy callada, quizá lo que menos me gustó, su compañera es muy risueña, habla y bromea contigo mientras estás jugando.

En la cama al principio la note algo tímida, y es muy callada, pero a medida que fuí calentándola se fue soltando, empezó a abrazarme con todo el cuerpo y a mostrarse muy cariñosa. A mí me encanta el juego y esto la gran mayoría de mujeres lo agradecen mucho. Besa muy bien para ser asiática, con intención y suavidad, casi todas con las que he estado tienes que "enseñarles" antes porque no saben hacerlo. Además sabía a frambuesa, detalle que me sorprendió gratamente.

Hicimos las posturas que yo quise, no me puso pegas y sabe moverse. Iba con la idea de descargar dos veces, pero estaba cansado y ya me dí cuenta de que no iba a ser capaz de llegar a una segunda, puedo estar horas dándole cuando me pasa esto que no lo consigo. Ella lo notó, se puso de rodillas estando yo de pie y me la estuvo chupando un cuarto de hora sin parar. Lo hace bien, con ganas, dejándose dirigir y con momentos de metérsela entera. Al final desistí, pero la chica se portó, no quería dejarme a medias.

Me acompaña a la ducha, abrazándome, metiéndome mano y dándome muchos besitos. Mientras estaba duchándome pude escuchar como fue junto a Yuyu para contarle la jugada. Se empezaron a descojonar mientras Yuyu le comentaba "te lo dije". Se ve que le gusté. Yo me reía para mis adentros porque ellas no saben que puedo entenderlas.

En total hora y media de encuentro contratando una. No me metió prisa en ningún momento y tampoco vino nadie más en el tiempo que estuve allí, por lo que estaban más relajadas. Salí contento, saciado de orientales para una temporada.

P.D: desde el último post el hilo ha tenido casi mil visitas en menos de una semana. ¿Me van ustedes a decir que soy el único que se le has tirado? Así dan pocas ganas de seguir escribiendo, no creo que todas las experiencias vayan a ser como las mías con estas mujeres.

Tienes razón poco se escribe, yo he estado con Mónica 2 veces, la primera en el piso y la segunda en mi casa, En el piso, ya esta descrita físicamente, ella tenia frio, la abrace un poco `para darle calor y pronto se puso muy cariñosa, besa normal, para mi no fue nada extraordinario ni malo, en cuanto a la cama estuvo siempre preocupada que estuviera a gusto, las posturas que yo quise, al chupo hasta que le pedí ir al lio, la verdad una experiencia muy placentera, haciendo honor a la fama d una asiática. En mi casa un día lluvioso, se comporto igual que en el piso, muy bien, pero hizo notar que no le gustaba mucho salir.
Voy a repetir la verdad me gusto la experiencia, la recomiendo