NOMBRE: María
RECIBE: C/ Tinte
TELÉFONO: 688567914
NACIONALIDAD: china
EDAD: No lo se, treinta y muchos o cuarenta y alguno
CUERPO: Propio de su edad, lo peor su barriga y culo. La primera excesiva (no es con todo una chica gorda), el segundo demasiado cuadrado. Lo mejor sus tetas, tienen un buen (a mi gusto) tamaño y sobre todo están muy bien hechas. Pezones sin rugosidades, lisitos y de los que se ponen de punta. No voy a puntuarla pues es difícil hacerlo si el baremo es el mismo que el de una joven.
CARA: No es guapa. Tampoco es un coco. Lo mismo en cuanto a la puntuación.
ORAL: Sin. Lo mejor que tiene. Lengua juguetona.
ANAL: No lo se, se deja meter un dedo
TARIFA: 80 1h, 50 1/2h… ¡Albacete es muy caro!
IMPLICACIÓN: Buena. Una chica complaciente. Te trata tiernamente y quiere agradar. No me puso pegas a nada, aunque tampoco soy de los que buscan los límites. La mamada muy buena, no muy profunda pero juega con su lengua incluso por el culo, no fue beso negro porque tampoco se lo facilité. Follada y masaje final, de los normales. Es difícil hablar con ella.
RECOMENDABLE: Cuando veo el tipo de chicas por las que la gente pide información en este foro veo claro que no puedo recomendarla sin riesgo a que luego me pongan de vuelta y media. Yo no salí insatisfecho. Esperaba, eso sí, alguien más joven o más guapa. Nada hubo por la cual recomendarla especialmente pero tampoco por la cual despreciarla con la saña que a veces gastamos.
REPETIRÍA: Si vuelvo será para ver si está disponible la que se supone es su compañera. Si no está no me marcharé (no suelo hacer esto). Tampoco se como es la supuesta Anna.
Para el resto:
Hace un tiempo había en Albacete unos cuantos pisos de “trabajadoras” chinas, actualmente solo queda (según creo) el de Calle Tinte.
El nivel, por lo general, y como se viene comentando en el foro, es bastante bajo. Las chicas que trabajan en ellos suelen tener ya una edad como para estar cuidando nietos, y la que es joven no suele ser ninguna belleza. Hay excepciones, claro está, pero cuando llega una que vale la pena se va pronto a otra ciudad que le ofrezca más trabajo. Recuerdo que hace ya años estuve en dicho piso de C/ Tinte con una preciosidad (Fei Fei, o algo así) al lado de la cual la mayoría de estrellas de Hollywood parecerían hombres… y no de los guapos. Aunque no era demasiado extrovertida ni especialmente implicada, era una preciosidad. Tanto es así que, en contra de lo que acostumbro, acudí a los pocos días para repetir con ella… ya no estaba. Según me dijeron estaba de vacaciones en su país. Supongo que, lejos de ello, ya estaría trabajando en Barcelona, Valencia… o vete a saber donde.
Recuerdo también a otra chica, Momo, en C/ Pablo Medina, con la que me encontraba realmente a gusto. Bastante joven, bastante guapa, cuerpo delgado, y… super-simpática. Guapa, ¿lo he dicho ya?.Me gustaba.
Con ella sí que pude repetir en varias ocasiones, pero por algún motivo, aunque permaneció un tiempo en el piso, dejó de trabajar, y al final, como las otras se fue.
Hubo otro piso en la ciudad que frecuenté, en el Paseo de la Libertad. No recuerdo los nombres pero por esa época fui varias veces, casi todas con una chica alta, delgada, no especialmente guapa, lo suficiente. La afeaba un poco las cejas pintadas y algún que otro tatuaje, pero una auténtica máquina sexual en la cama. Recuerdo que la primera vez que fui lo hice con la mami, esta sí que era guapa, treinta y pocos años, gran melena negra, guapa, simpática. Posteriormente no trabajaría más y te remitía a una de sus chicas, bueno, a la única que yo creo que tenía. Excepto un día que pasé con la primera, como era habitual pagué una hora y por algún motivo tuve problemas para que se me levantara en el segundo polvo. Bueno, pues como por narices tenía que irme yo de allí satisfecho, la chica llamó a la mami y las dos acabaron el servicio. Y acabó bien. ¡Oh, sí!.
La verdad es que las dos eran simpatiquísimas. Acababan el servicio y se quedaban a charlar conmigo, me contaban cómo la chica era una pequeña ludópata y se fundía las tarjetas Visa en los casinos (incluso me enseñaba todo un rosario de éstas que desplegaba por la cama). En alguna ocasión hasta me invitaron a comer allí con ellas. Parece que les gustaba hablar conmigo, lo que demuestra que sí, que trabajan en esto por dinero, pero que hay toda una historia detrás y que tienen necesidad de contacto humano como cualquier hijo de vecino.
Y recuerdo el mejor polvo que he tenido con una lumi. De esto hace algún año más, incluso. Cerca de los terrenos de Renfe, por la calle Valdeganga. Se anunciaba en La Tribuna, creo que estaba sola, tampoco recuerdo su nombre pero sí que era un auténtico llino. En cuanto abrió la puerta , por algún motivo, está claro que le gusté. No era guapa. Tampoco muy fea, cuerpo compacto pero no bajita, ancha de pecho, tetas pequeñas con unos pezonacos como chupetes. Cuando te besaba te metía la lengua hasta la traquea, y sin duda sabía follar, como una salvaje, como si fuese la última oportunidad de hacer lo que más le gustaba. No he visto a ninguna otra mujer, profesional o no, correrse como ella lo hacia. Mamándomela ya chorreaba muslos abajo, pero fue metérsela (ha sido una de las pocas veces que lo he hecho sin condón con una lumi) y no era ya una gotera, la cosa era como un grifo abierto, unos orgasmos espasmódicos que estoy seguro que eran sinceros. ¿Cómo fingir eso?.
Cuando quise repetir (¿quién no iba a querer hacerlo?) ya no contestaba al teléfono, según creo un fijo. No he vuelto a saber de ella ni del piso donde me recibió.
Y por último, en el ranking de las mejores, merece ser incluida en una posición destacada Sofía. No se muy bien en qué piso la ví la primera vez, posiblemente en C/ Tinte o C/ San Antonio, no lo recuerdo. Pero tiempo más tarde apareció un nuevo chinipiso en la calle Pedro Coca y ella era la mami. Recuerdo un día que me abrió vestida con minifalda y calcetines de colegial, caminando por el pasillo delante de mí yo observaba sus pequeñas y bien formadas piernas y su culo redondo, no muy grande pero de formas casi perfectas. Después de unas pocas visitas conformándome con el material de baja calidad que solía tener (una me confesó tener 60 años, y el hecho que no los aparentase solo abunda en la realidad de lo que cabe esperar en estos sitios) le pedí pasar con ella. Tras pensarlo un poco decidió complacerme.
Era una chinita pequeña, cara redonda, muy china, de ojillos inteligentes. Edad indeterminada, e indeterminable. Pasaba los treinta y seguro que se acercaba a los cuarenta, pero solo la denunciaba su vientre ya no del todo liso, por lo demás podría haber tenido no más de 25 años.
Follar con ella era como hacerlo con tu novia. Era una profesional que asumía que estaba para darte placer… y lo daba.
Poco después le pasó el piso a otra chica a la que también caté, no tan guapa como Sofía. Recuerdo que un día comiéndole el coño le provoqué una abundante corrida.
Este piso debió tener algún tipo de problema con los vecinos, según me comentó una de las chicas por culpa de un cliente borracho. El caso es que la última vez que fui había una gran mancha de pintura negra en el rellano, junto a su puerta. Poco después cerró.
Aún conservo el teléfono de Sofía. La última vez que la llamé regentaba un piso en Málaga. Me confirmó que el piso de C/ Pedro Coca había cerrado. Me dijo que si iba a Málaga ella misma me atendería. Nunca fui.
En fin. Es este un resumen de mis andanzas con chinas en la ciudad a lo largo de los años. Con las mejores al menos. Hubo otras también guapas, y muchas más feas o poco recomendables. Desde que probé a la primera oriental he de reconocer que siento una especial predilección por ellas, no porque sean las más bellas (no al menos las que se dedican a esto) sino porque en términos generales son más complacientes y te tratan mejor.
A parte de esto sí que creo que una oriental guapa lo es un poco más que otras que no sean asiáticas. Esto son consideraciones personales en cualquier caso discutibles. La realidad es que es difícil defender esta postura a tenor de lo que nos encontramos en un chinipiso en la actualidad… pero sigo pensándolo.
¿Y cual es la actualidad?. María.
Hacía ya un tiempo que no iba por este piso pues las dos chicas que conformaron durante bastantes meses la plantilla no eran mucho de mi agrado. Hasta que ví que anunciaban una nueva, Yio Yio, y fui a verla. Siento no haber posteado sobre ella pues aunque era ya algo mayor (como todas en realidad), sí me pareció merecer la pena. Era bastante guapa de cara, dientes algo desviados, delgada, poco culo, barriguilla de mujer madura (siempre las delata), tatuaje feo de una mariposa ocultando una cicatriz en su vientre, bonitos pechos, simpática e implicada. Me plantee repetir pero cuando me decidí ya se había ido. Y en su lugar se anunciaban otras, Anna y Malia (yo entiendo que quieren decir María, quien sabe), así que fui a verlas.
Llamo desde abajo sin avisar antes por teléfono y abren la puerta enseguida. Para los que no conocen el edificio hay que decir que el sitio no es precisamente discreto, es evidentemente una calle concurrida y el tiempo que transcurre entre que suena el timbre del interfono y abren la puerta se hace eterno. Están en el primero, lo que evita tener que coger el ascensor. El piso no está mal, un piso grande, no muy viejo y a excepción de algún atisbo de moho en la bañera (que nunca he usado) está lo suficientemente limpio. No hay que ser muy exigente en este sentido. Me gustaría ver la casa de algunos…
Como digo, llamo y subo. Me abre sigilosamente la que creo que es la actual mami, no estoy seguro. Vestida de pijama, también madura, melena morena, seria. Me lleva a la habitación habitual y me dice que espere. No se quien es Anna, pero esta mami tiene un punto que me pone. Pero no tengo oportunidad de probarla, se presenta María y ahí acaba el paseillo, no hay más. Y quedo bastante decepcionado. No solo porque María no sea guapa, sino porque me quedo con ganas de probar a la primera. Esperaba que el desfile continuase y se presentase ella con algo más apropiado para la ocasión (aunque he de decir que me encanta ver a una mujer en pijama). No fue así. Total, que pacto una hora con María. 80 reales de vellón.
María es, como digo, poco guapa. No quiero decir que sea fea, pero no es guapa. De mirada dulce, tímida, trato afable. Con una media melena lacia recogida en un moño (que posteriormente yo solté) se le ve la cabeza demasiado pequeña. A través del picardías se le adivinan dos buenos senos. Luego tuve la oportunidad de ver que efectivamente era así, lo mejor que tiene. No por su tamaño, pues quizás resulten algo pequeños para enfermos tetófilos y algo grandes para los que, como yo, preferimos la planicie mesetaria. Pero siendo razonable, creo que tienen el tamaño justo para ser referencia en un teórico canon de belleza mamaria.
Pezones de areola lisa, una continuidad de la piel del busto en un tono más sonrosado. Blanditos y en un principio no muy grandes pero que al excitarse crecen y se endurecen, sin ser pezonacos. Unas tetas erguidas y hermosas.
Del resto de su cuerpo no hay mucho a destacar. Vientre grande, no descolgado pero que le da una apariencia a su tren inferior algo ancha, y eso sin que sus caderas lo sean necesariamente, y provocan visualmente una desproporción con respecto a sus piernas, que son mas bien finas, y su culo, no muy grande y mas bien plano.
Pago y sale a entregar el dinero, me voy desvistiendo. Cuando vuelve lo hace vestida con el mismo picardías y batín, pero se ha puesto unas medias negras que suben hasta la mitad de los muslos. No se quitará estas en todo el servicio.
Me lava con esmero, tanto la polla como el ojete. Paso a la cama y es ella la que se queda lavándose. Su higiene parece correcta. Cuando vuelve acaba de desvestirse y aprecio bien todo lo que he descrito anteriormente.
Se sienta junto a mí y empieza a chupar, lo hace con calma. Mi polla entra y sale de su boca con suavidad , utiliza su lengua tanto cuando la tiene dentro como para juguetear con el glande, o recorrerla arriba y abajo con vibrantes lametones. Acaricio sus senos y oriento mi mano en dirección sur, ella se arrodilla y ofrece su trasero, las piernas algo abiertas para que tenga acceso a su coño, se deja tocar y la voy masturbando, sin introducir mucho mis dedos. Ya está algo mojada y “motu proprio” empieza a acelerar el ritmo de su mamada… y de su lengua. Ya no se limita a mis genitales, recorre pubis, muslos y ano, no le doy fácil acceso a éste y veo que tiene intención de cambiar de postura y meterse entre mis piernas. ¿Pretende hacerme un beso negro?. No lo se, la atraigo hacia mí y la beso, su lengua sigue igual de excitada. Acomodada en mi cadera mi polla, bien tiesa, empieza a frotarse contra su coño, ella hace movimientos pélvicos hasta que inevitablemente y sin necesidad de orientarla acaba entrando, gime, ralentiza sus movimientos, parece estar disfrutándola. Yo empiezo lentamente a bombear, no se la clavo entera pero ya es una verdadera penetración, esto se prolonga durante unos minutos. Hasta que se incorpora y coge un preservativo, me dice “mejor condón”, “claro”, me lo pone y seguimos en la misma postura, estamos así largo rato. No quiero acelerar demasiado. No quiero correrme. Finalmente cambio de posición, la tumbo y yo paso arriba. De rodillas abro sus piernas, observo su coño y lo acaricio antes de clavarla de nuevo. Es un coño bonito, largo, cerrado, los labios no sobresalen, con vello púbico fino arriba, no alrededor. Lo abro y se aprecia sonrosado, húmedo. El clítoris está enfundado pero ella con sus dedos lo hace emerger, pequeño pero durito al tacto. No se lo como, me echo sobre ella y la penetro de nuevo, con embestidas más enérgicas pero controlándome para no acabar antes de lo que es mi propósito, y mi propósito es aguantar bastante. Inmovilizo sus manos sobre su cabeza con una de las mías, con la otra tanteo como entra mi polla. Sus jugos resbalan ya hasta su culo. No es María de las que tienen dificultad para lubricar. Y aprovecho la situación para meter un dedo en su culo, primero masajeándolo por fuera, no protesta. Posteriormente lo introduzco un poco. Tampoco se queja. No voy más allá.
Con esto no quiero afirmar que haga anal, esto no lo se. Muy dilatado no parece.
Y acabamos. Me incorporo y acelero mientras veo la penetración. Me corro como un bendito. Llevamos entre lo uno y lo otro cuarenta minutos y ya empiezo a estar cansado. La edad no perdona, no. Se queda abrazada a mí y yo estoy deseando apartarla y relajarme. ¡Como somos los hombres!. No porque me pase con ella, es que es igual con mi chica.
Tras asearse vuelve y se sienta a mi lado, intento mantener una conversación pero se hace complicado, así que acepto el ofrecimiento de acabar en un masaje. Acerca de esto no hay mucho que contar, ella no es masajista. Tiene, eso sí, más fuerza en las manos de lo que pueda parecer. No es un masaje desagradable pero tampoco es profesional. Qué más da.
De lo narrado alguien puede inferir que me gustó la experiencia, y no irá muy desencaminado. El polvo estuvo bien y como he mencionado la chica hace lo posible por agradar. ¿No es guapa?, pues no. ¿Resulta caro?, pues sí. Pero hay ocasiones en que uno se encuentra a gusto con una chica por la que no apostaría gran cosa, siempre que no sea repulsiva… y María no lo es.
Los siguientes 7 Usuarios dan las gracias a Ago por este Post:
Corro el riesgo de que alguién crea que voy a comisión en este piso. Me da igual. Ya he explicado que prefiero una buena experiencia a un culo joven, y aunque ambas cosas no sean incompatibles, a veces así me lo parece. Y será por mis naturales inclinaciones hacia las asiáticas, porque he tenido más bien mala suerte con otras, o porque no se escoger a la hora de solazarme con una meretriz, el caso es que siempre suelo disfrutar más con una doncella amarilla (aunque haga lustros que haya dejado de serlo) que con una de cualquier otro tono de la gama cromática.
Y esto se explica más en la diferecia de carácter que pueda existir entre ellas, que en las diferencias físicas, pues siendo notables las segundas creo más evidentes las primeras.
NOMBRE: Luna. Me pareció que dudaba un poco. No sé si se le ocurrió en ese mismo instante.
RECIBE: Calle Tinte. ¿Dónde si no en esta ciudad?.
TELÉFONO: 688567914
NACIONALIDAD: China... está claro.
EDAD: No he preguntado. Por experiencia se que suelen aparentar (mucho) menos de lo que es su edad verdadera. Por ello si digo que unos 35 años quizás yerro demasiado... pero no me engaño. Por ahí andará.
CUERPO: Pese a que su madurez se aprecia más en éste que en su cara he de decir que a mí me gustó. ¿167 cmts?. Delgada. Tripita algo marchita. La afea algo (poco) una cicatriz en el pecho y algo (más) un tatuaje encima de ésta. Por lo demás su cuerpo puede aparentar menos edad que la que acabo de calcular. Tetas pequeñas, más bien blandas, con pezones poco dados a la erección. Brazos y piernas finitos, término que en el caso de las segundas no solo hace referencia a su escaso volumen si no también a su longitud (vamos, que son más bien cortas). Manos pequeñas, idoneas para sobredimensionar de golpe una polla... y ríete tú de las bombas de vacío de un Tuppersex. Un bien merecido 7'5 (no me gusta puntuar... pero voy a hacerlo)
CARA: Seria (no quiero decir antipática). Facciones algo duras. Un tanto desgreñada. Me parece guapa. Me parece que a otros no les parecerá tan guapa. Me parece, en todo caso, que a nadie puede parecer fea. Un bien merecido 7'5.
ORAL: Sin. Bueno. Luego desarrollo. Un bien merecido 7'5.
ANAL: Ni puta idea.
TARIFA: 50E 1/2 hora (contratada). 80E 1 hora.
IMPLICACIÓN: Notable. Tengo, en un principio, la impresión de que no sea habitual que ella reciba clientes. Esto, y cierta seriedad en su actitud, que la hace parecer moverse por automatismos convencionales, me hace suponer que será más bien fría en el trato. Y algo de esto hay. Ella no te mira con ojitos tiernos como María pero tampoco te sientes despreciado, más bien todo lo contrario una vez que está metida en faena. Y en faena se mete arremangándose bien, de eso no hay duda. Un bien merecido 7'5.
RECOMENDABLE: Sí. Sí para aquellos que no busquen la típica chica de apariencia vulgar, cuerpo más bien joven (hhhmmmm, habría que verlo), de culo monumental (en la mayoría de los casos excesivo), tetas tuneadas en forma de arco conopial (tumbado), tatuajes de dudoso gusto y piercing sobre el labio superior.
REPETIRÍA: Ultimamente me estoy pasando un poco en mis escapadas y me reservo alguna para el género que se ofrece en otra ciudad, pero si está un periodo algo prolongado en este piso, sí volveré. Todo sea que ese día no trabaje ella. Intentaré informarme previamente.
Debe ser que con la edad me voy haciendo poco dado a la experimentación y prefiero asegurar la jugada con chicas que de antemano ofrezcan unas mínimas garantías. Algo complicado en Albacete por el continuo va y ven de éstas, sobre todo de las que valen la pena. Y no es que haya sido nunca un irredento sensualista, pero mi carácter apolíneo se acentúa de una manera directamente proporcional a los años que voy sumando, subrayando mi anverso más equilibrado.
Pese a ello, aún en ocasiones, y ultimamente se ha repetido más de la cuenta, aparece mi reverso dionisíaco, mi lado oscuro, que precisa para su goce satisfacer las más extremas fantasias.
Y es así que, en contadas ocasiones, busco situaciones que no se corresponden con mi carácter. De las que salgo, por norma general, más bien escaldado.
Es en este contexto que me decido, una vez más, por una madura. Debe ser ésta una una fantasía recurrente que de vez en cuando emerge y pocas veces acaba bien. Al menos ultimamente. No iba a ser ésta la excepción, y no por culpa de ella, pues por una vez sí aparece a mi encuentro una cincuentona sexy que brinda lo que promete. Pero debe ser que aunque mi subconsciente domine mi voluntad no ejerce el mismo control sobre mi órgano viril, que a modo de protesta, cual estudiante en HongKong, opta por una pasividad beligerante que impide consumar mis íntimas aspiraciones.
Es posible que pronto postee brevemente acerca de esta experiencia pues algún forero pide referencias acerca de la chica en cuestión, pero sin duda lo haré sin demasiados detalles. En la guerra no es conveniente divulgar las derrotas. Hablo de Loly.
Cuento esto porque ese primer encuentro explica, ya que tuvo una capital influencia en mi estado físico y psíquico, el desarrollo del segundo. Luna.
El tema es que una vez acabado el episodio me lanzo a la calle un tanto abrumado, con sentimientos encontrados por, una vez más, caer en el mismo error de siempre. Error que evidentemente cuesta dinero, más de lo que era previamente mi intención, pues si hay algo que censurar a esta profesional (ella dice no serlo... y es posible) es que me cobró más de lo que anuncia por el servicio. Esto lo explica cierta docilidad propia de mi caracter, no creo que para la mayoría de foreros que aquí publican sea muy dificil controlarla en este pecuniario aspecto.
Una vez fuera aprovecho para hacer la gestión que me ha llevado al centro de la ciudad y quiere el destino que para realizarla tome rumbo a Calle Tinte, lo que me obliga (bueno, no es así, podría haberme desviado) a pasar por delante del piso donde se encuentra Luna. Tengo algo de tiempo. Puedo plantearme media hora. Dudo porque no estoy precisamente en un estado sosegado. A esto hay que sumar que acabo de, si no tanto follar, sí eyacular. A esto hay que sumar que implica un gasto de 50 Euros más a lo ya derrochado... hhhmmmmm... los llevo en la cartera, ¿quién será Anna?, ¿me recibirá María?, y la mami, ¿también trabajará?. En fín. De perdidos, al río. Subamos. Y subo.
Una vez más sin llamar. Tampoco se hacen esperar. Cuando abren la puerta, con el mismo sigilo habitual, compruebo que lo hace la "mami" del otro día, pero esta vez no viste pijama, sino un vestido tipo furcia que deja al descubierto sus hombros y pecho, así como sus piernas. Las chanclas que calza (de andar por casa) conjuntan bastante mal.
Me indica hacia la habitación y caminando por el pasillo me dice que solo está ella. Mejor.
Lo que voy viendo con más detenimiento empieza a gustarme. Aprecio una delgadez que ya intuía cuando la vi en pijama. Observo su cara, con la seriedad que presumo habitual. La recordaba con una melena más leonina, en realidad es media melena que asegura con una cinta de pelo, algo desgreñada, sin demasiado esmero. Mientras pactamos el servicio parece evitar mirarme a los ojos, y es curioso porque, no en la felación, pero mientras la poseo estando encima suyo (la del misionero es la única postura que con ella practico) no deja de "clavar en mi pupila su pupila azul" (permítanme esta licencia poética, en realidad sus ojos son negros... como el azabache). Le pregunto su nombre para saber si es ella la Anna que se anuncia. Tras pensarlo un segundo responde que se llama Luna. Sigo sin saber como es Anna, si es que está... si es que ha estado alguna vez.
El encuentro es el habitual. Me lava y mientras lo hace pregunto por María. Dice que "está salida". Acerca de esta expresión ya hay suficientes bromas en el foro. No voy a abundar en ello.., aunque cuando lo dijo esbocé una leve sonrisa.
Tras lavarse ella se desnuda y evalúo su cuerpo, como digo delgado, pechos pequeños, bonitos aunque hayan perdido parte de su firmeza, coño rasurado, mata de pelo recortada en pubis, como un mechón.
Pasa a mi lado y empieza a chupar. Y lo hace bastante bien. Utiliza, como María, su lengua, aunque imprime algo más de ritmo que ésta. Tiene más decisión, sin obviar por ello mis requerimientos. Jadea mientras lo hace, sin estridencias. No voy a extenderme mucho más. Ya antes la he puntuado.
Tras un buen rato mamando (dentro de los límites que media hora te permiten) me pregunta si solo quiero practicar sexo oral (en otros términos, claro está), sonrío y la paso abajo.
Ya en esta posición se deja besar, no solo eso, lo hace sujetando fuertemente mi cabeza y atrayéndola para sí cuando dejo de hacerlo (besarla). Y me enfundo con el preservativo.
Su coño tiene muy buena presencia. Es bastante cerradito, aunque no lubrica igual que María. Con todo parece estar disfrutando. Sus jadeos se hacen más notables cuando la penetro y empieza a mover su cadera coadyuvando a una más profunda penetración. Intentándolo al menos, ya que sus movimientos al no estar del todo acompasados con los míos surten más bien el efecto contrario. Pero esto igual es más bien culpa mía. Y como digo, parece disfrutar. Evidentemente uno nunca sabe cuánto hay de teatro en todo ello, y es de suponer que bastante. Pero si es así, hay que decir que lo finge muy bien.
Para muestra, un botón. Después de un rato bombeando lo más fuerte que mi estado, en ese momento, me permite, me incorporo un poco y se la saco, pero ella energicamente grita "dentro, dentro", y cogiéndome del culo hace fuerza para sí hasta que vuelvo a introducirla, marcando con sus delgados brazos el ritmo, más acelerado éste, hasta que me corro dentro de ella.
Esto es por lo que yo he valorado positivamente su implicación. Me da igual si todo es, como en el cine, falso. Si es cine lo es del bueno.
No tenemos tras ello mucha oportunidad de hablar. Le pregunto, eso sí, si trabaja siempre, aún cuando están en el piso sus compañeras. No se si me entiende bien, me contesta con un lacónico "yo siempre aquí" que no me lo aclara demasiado. Es seguro que volveré para comprobarlo
Los siguientes 5 Usuarios dan las gracias a Ago por este Post:
Hola. Nunca e probado los servicios de una profesional. E llamado a este numero y ma contestado y amable mente y man dicho la direccion. No quiero tirar el dinero. Vale la pena este servicio para un chabal de 19 como yo?
A ver. Yo solo te las recomendaría si asumes que inevitablemente son bastante maduras. Más o menos ya he descrito cómo son físicamente, y si para ti ello es muy importante, y me refiero a que más bien estés acostumbrado a jovencitas, pues tú eres el que debería hacerse esa pregunta.
Si lo que buscas es implicación, creo que sí son bastante recomendables.
No te puedo asegurar que Luna trabaje siempre, en cualquier caso es la mejor opción en este piso.
De todos modos, la implicación no lo es todo. Una profesional puede trabajar muy bien, comerte a besos, tratarte mejor que a su novio... pero si ella no te gusta.
Confirmar que Luna recibe como integrante de la plantilla, y de la titular (quizás sea la única a día de hoy). He repetido y confirmo lo que escribí. Solo detallar que exageré un poco su belleza. Le falla un poco la dentadura. Por lo demás... aceptable.
El siguiente Usuario da las gracias a Ago por este Post:
Modo Lineal
