Luz, madura argentina

Me apetecía ofrecer un I+D. No he estado con muchas argentinas. Vi que Luz acababa de estrenar su hilo de profesional. [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ] Por teléfono estuvo muy simpática, con su acento claramente argentino aunque sin los excesos de algunas variedades (el porteño, por ejemplo). Me dijo que su horario es hasta las 20:30, pero que tiene facilidad para recibir más tarde. Me concedió visitarla a la hora que podía y me decidí.

Servicio de media hora por 40. Pagué al irme, unos 45 min. después de llegar. Ella mantenía que eran 40, pero logré que aceptara algo más. Se lo ofrecía con gusto, correspondiendo a lo agradable que fue la cita y al tiempo que pasó de lo pactado.

Local con puerta a la calle en la zona de Bilbao y Alonso Martínez. Se suben unas escaleras para llegar a su cuarto. Me dijo que en ese local atienden otras dos chicas que no están en el foro, cada una en su cuarto y funcionando totalmente independientes. Ella está empezando ahí y aún no tiene la habitación como piensa ponerla. Es espaciosa y hay un espejo en la cabecera. Hay baño y lo tiene inmaculado (una bañera grande y al menos un palmo más elevada de lo habitual). No tiene perchero pero había colgado de un clavo un par de perchas donde dejar la ropa.

Anuncia que tiene 47 años. Podría ser alguno más; tampoco estoy seguro. Medirá en torno a 1’70 descalza. Está más bien delgada. Senos medianos y un cuerpo que presenta blanduras propias de la edad. No está nada mal, no siendo el cuerpo de una mujer joven. Su cara es graciosa y simpática. Gana con el pelo suelto. Tiene un verruga en alguna parte de la cara. Mejor no detallar más, pero tampoco es plan no mencionarla. No hace bonito, claro, pero a mí no me echó para atrás ni fue un problema a lo largo del servicio. De nuevo, no se debe esperar una cara juvenil; ni tampoco un rostro que desmerezca para una acompañante que está a las claras en el sector de las que son maduras.

Me recibe en lencería y tacones. Sobre la cama tenía dispuesta toalla y sábana de tela para extenderla encima, pero apenas entramos en el cuarto me empezó a besar con pasión y yo me metí de lleno en la jugada. Nos desvestimos el uno al otro entre besos pasionales, tocándonos y agarrándonos sin miramientos por todas partes y con todo. La ducha inicial se fue a paseo. Yo estaba en buenas condiciones de higiene, pero no es obvio que el cliente vaya bien limpio y admito que hubiera sido mejor refrenarse y pasar a asearme. Como digo, ella lo tenía todo dispuesto para hacerlo antes de nada (no sé si hubiera sido los dos juntos, por separado o solo yo) pero tampoco es la primera vez que me pasa esto de saltarlo porque la pasión estalla al primer contacto y a ver quién para eso. Ella estaba bien limpia, como se presupone que lo está una profesional cuando recibe a un cliente. También se fue a paseo el trámite de ofrecer una bebida, pero al acabar cumplió con él.

La implicación fue perfecta. El sexo oral a ella exquisito. El de ella a mí tremendo. Una eternidad, sin cansarse, haciendo montones de cosas distintas, en muchas posiciones, bajando del todo, dejándome embestir con cierta fuerza y velocidad (sin pasarme; no diría que fue tanto como face fucking). Acabamos yo sobre ella, actuando con cierto vigor; tan a gusto los dos. Fue una buena integración de sexo amoroso y cañero; una demostración de que son compatibles. Me gustó mucho que fuera así. Besando abusa de la lengua para mi gusto, pero no tengo queja y hasta puede que pegara bien en esa mezcla que digo. En el hilo dice que hace griego. Por tf. me dio a entender, con sus simpáticas explicaciones sobre cómo es el servicio con ella, que si no va a ser para bien de los dos (entiéndase, suyo) mejor no hacerlo, porque no se trata de que alguno lo pase mal. Quizá eso me cortó de proponérselo. Al final le pregunté si lo hubiera aceptado y me dijo que sí. En todo caso, en su hilo pide suplemento de 20 eu. por hacerlo en el servicio de una hora (si no son 70) y no dice nada de hacerlo en el de media.

Se excusaba porque quizá es demasiado habladora. No sé… no me pareció tanto. No paramos de tener sexo todo el rato, sin pausas para charlar. Si algo decía eran cosas halagadoras y otras que surgen cuando se está así.

En fin: me lo pasé muy bien con ella y la considero una buena acompañante. Sobre su físico y su condición de madura no tengo más que decir. Que cada uno vea.