Macarena 25 española.

Nacionalidad: Española.
Forma de Contacto: Whatsapp.
Hilo profesionales: [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]
Fecha aproximada: Finales de abril.
Lugar: Mi casa.
Higiene: Buena.
Precio: 80 masaje y manual.
Edad: 25 años aunque aparenta menos.
Cara: Muy guapa, redondita con ojos claros y nariz pequeñita.
Pelo: Media melena rubia.
Cuerpo: Pequeñito, 1.55 de altura, muy manejable, tonificada y con curvas, mejor que en las fotos que creo no la favorecen.
Pecho: Pequeño, lo que cabe en una mano, pero tersos, con pezones pequeños también.
Culo: Proporcionado, duro, con formas y sin celulitis ni estrías.
Actitud: Positiva, alegre y complaciente.
Conversación: Amena y culta, siguiendo la tuya sin pasarse.
Besos: Muchos pero sin profundidad.
Fuma: No creo, al menos no noté nada.
Francés: Natural, tirando a bueno, con mucha saliva pero ayudándose con la mano.
Forniqueo: No hubo. (Parece que lo está pensando). Cuando pongo la expe ya lo hace.
Griego: Ni hablar.
Lo mejor: Su implicación y ganas, además de la simpatía.
Lo peor: Que no se decidiera por el completo.
¿Repetir?:Seguramente si cuando ofrezca sexo.
Valoración global de la experiencia: 7.

Relato: Acude a mi piso muy puntual a la cita con aspecto normal, con vaqueros y cazadora bajo la cual una camiseta de tirantes deja ver su juvenil y atractivo canalillo, por ello creo que llama la atención y tus ojos se van directos a ese punto. Guapa y sonrisa atractiva con aspecto más juvenil de lo que indican los años en su hilo. Andaluza, aunque haya perdido gran parte de su acento.
Para romper el hielo y calmar nervios ya que parece que lleva muy poco o nada según ella en esto le ofrezco bebida y la consabida agua es lo que me solicita. Entre frase y frase vamos cogiendo confianza y empezamos a hacernos caricias y roces variados. Algún piquito, no los rechaza e incluso los busca ella.
La temperatura sube y aún de pié en el salón comienza a desabrocharme la camisa mientras le doy besitos en el cuello y hombros a los que parece receptiva.
Al poco, y tras confirmar que estamos aseados pasamos al dormitorio. Nos vamos desvistiendo para quedarnos en ropa interior. Como digo arriba, tiene mejor aspecto que en las fotos, piel tersa y formas de mujer como me gustan a mí, con diferencia de perímetro entre torso, cintura y caderas, aunque sus piernas no sean todo lo largas como para hacerla ideal. Muy manejable y ligera de movimientos.
Falta de iniciativa al principio y esperando que la dirijas, poco a poco empieza a mostrar buenas maneras, sus besos son más seguidos y profundos con algo de lengua mientras nos metemos mano por todos lados, al principio de rodillas, luego tumbados.
Paso de masaje porque intuyo que no es lo suyo ni lo busco tampoco. Ya sin sujetador, compruebo que sus pechitos pequeños y ajustados a la mano, son reactivos al tacto y los labios por el placer que sus gestos indican. Busca mi pene bajo los calzoncillos y comienza a acariciarlo cuando más lo deseaba, noto el calor de su mano y a los pocos segundos ya estoy en posición de revista. Al mismo tiempo la mía se ha ido de excursión a los bajos de Macarena y le agrada lo que encuentra, una zona perfectamente liberada de bello y muy atractiva de visitar por el calor y la fluidez que notan mis dedos que no pueden dejar de ahondar, con suavidad y delicadeza, dentro de la gruta estrecha y acogedora que descubren.
Noto que disfruta, yo también con todo lo que conlleva la situación, y ahora poniéndose de rodillas a mi lado pasa a un francés natural muy salivado, sin ser el mejor que me han practicado, pero muy bueno, con algo de mano y escupiendo en el glande de modo que se mojaron las sábanas. Al poco le digo que se ponga arriba sentada en mi entrepierna y que siga pajeándome en esa posición. Accede y las vistas mientras palpo y acaricio sus tetitas es espectacular.
Intento satisfacerla con mis dedos y al preguntarle cómo le gusta me dice que simplemente la mire. En esa posición y mientras me masturba a mí, haciendo círculos con sus dedos sobre su clítoris, al poco tiempo parece alcanzar el éxtasis y así quiero creerlo, pero ya se sabe, con las mujeres….
Ahora me toca a mí, y como no admite penetración, aprovecho la situación y la posición para terminar así, lo que consigue en muy poco tiempo por lo calentito que ya estaba.
Aún queda un poco tiempo que dedicamos a relajarnos, besitos, tocamientos y caricias.
Me pide ducharse, la acompaño al baño, se viste, le pago y despedida.

Resumen: Experiencia satisfactoria dentro de lo que ofrece. El que haya sido sólo manual no impide que haya gozado bastante, mejor incluso que las expectativas creadas a priori.
Ahora, cuando escribo esto, parece que se ha decidido por hacer sexo completo. Buen momento para repetir y experimentar nuevas sensaciones con una chica que parece tiene más recorrido.

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"Cambiar el mundo, amigo Sancho, que no es locura ni utopía, sino justicia".