Iniciado por jokinicp
Estas situaciones se dan porque nos fiamos más de los hilos de las profesionales que de las experiencias de los compañeros. También debe ser porque no acierto con las maduras que no llegan a 40 años. Hasta ahora son mis peores experiencias. Por todo ello, no iba con grandes expectativas y, lamentablemente, acerté.
NACIONALIDAD: Costarricense
EDAD APROXIMADA: Me confesó 37, me lo creo
TARIFAS APLICADAS: 80 euros una hora.
DESCRIPCION DE SU FÍSICO: Tipazo, de cara bastante guapa para mí y pechos pequeños y un pelín, sólo un pelín, caídos
VALORACIÓN DE SU FÍSICO: Cuerpo: 9
FUMA: Imposible saberlo. Explicación en el tema Besos
FRANCÉS SIN: Si, pero NO hasta el final
BESOS EN LA BOCA: Cero, picos y pocos
IMPLICACIÓN: Mal, 4 o menos
VALORACIÓN DEL SERVICIO: 4. Me defraudó el final del francés. Demasiada experiencia para mi gusto. Se salva un masaje, al menos, agradable
¿CHICA RECOMENDABLE?: Para mí, ni de coña
¿REPETIRÍAS?: Jamás
LO MEJOR DE ELLA: El masaje, por poner algo, y su tipo
.
LO PEOR DE ELLA: Francés, si se le puede llamar así. Implicación. Demasiado profesional
Relato de la experiencia: Quedé con ella unos días antes y el día fijado la llamo desde la calle, me da piso y nº. Subo y me recibe vestida con un body, medias y zapatos de aguja negros. Me gustó su aspecto, pero…. De besos ni hablamos, sólo algún pico y gracias. Me ducho, colutorio y a la cama.
Se quita el body y como la cosa parece que no arranca paso a quitarle las medias, el tanga y comienzo un cunnilingus. Después de un rato, parece que está en el cielo, pero no se humedece ni un poco. De meter un dedo ni hablamos, le duele. Normal, parecía el desierto de Almería. Se conoce que se aburre, como yo, y me invita a tumbarme para comenzar el francés. Aunque me acababa de duchar me la limpia con una servilleta (bueno, normal que extreme la limpieza)
Comienza con su trabajo, pero en seguida se cansa y empieza una paja, tal cual. Alguna vez la chupa un poco, segundos creo, y sigue con la mano. Como veía que aquello no tenía vuelta de hoja, aguanto sin decir nada (error mío) hasta que me corro. Una vez descargado, me limpia con una servilleta. Han pasado 30 minutos desde que llegué.
Luego me ofreció un masaje por la espalda que al menos fue agradable, aunque cuando me pasaba la mano por los hombros veía las estrellas, debo tener una contractura. Un poco de charla intrascendente y como ya era la hora, me vestí, pagué y me fui, pensando que había tirado la pasta.
De lo adicta al griego no sé, no practico lenguas clásicas, pero de garganta profunda, ni por asomo
|