Grata sorpresa
 

Hace un par de años, la empresa me mando fuera de Madrid, para poner en marcha un proyecto en una nueva delegacion. El viaje duraria unas dos semanas y era necesario hacer un i+d, de la fauna puteril de la zona.
Asi que al cuarto dia, me decido a buscar por la red a alguna madura, que es lo que mi me gusta, para pasar un buen rato y encuentro una que solo recibe por las tardes, en una calle cercana al hotel, donde me encontraba. La llamo por telefono, su voz es muy agradable, incluso me resulta familiar, y concierto con ella para media hora despues, ya que me dice que ella no se dedica a esto y que tiene que ir al piso. Las fotos del anuncio se nota que son caseras y se ve a una mujer de unos cincuenta años, con buen cuerpo, morena de piel y pelo, acompañada de una rubia, que tambien da servicio en la misma casa, mas o menos de la misma edad, que ofrecen servicio de lesbico. La morena que es la que a mi gusta se llama Mimi.
Llego al piso a la hora acordada, me abre la rubia llamada Debora, le pregunto por Mimi, me hace pasar, me da dos besos y me pide que espere un momento que enseguida sale, ofreciendome algo de beber. A los pocos minutos aparece Mimi y OH! sorpresa! Mimi en realidad se llama de otra manera y es una de mis compañeras, de la delegacion de mi empresa, que por las tardes se dedica a ganar un extra, haciendo algo que le gusta. Imaginaos mi cara, la suya, y la de Debora cuando le contamos lo que pasaba. Servidor, como caballero que soy, decline efectuar el servicio, pero Debora dijo que ya que habia ido, y nos conociamos todos y eramos adultos, que me quedara y por el precio acordado, haciamos un lesbico con las dos.
En fin, decir que fue maravilloso, y que al dia siguiente en la empresa, todo fue como si ni hubiera pasado nada, guardamos el secreto, y mis quince dias en la ciudad fueron la bomba, ya que tuve varios contactos con Mimi y Debora, incluso de cenar, salir y tal, como amigos, paro casi todos los dias con un final feliz, con una, la otra, o las dos.