Andressa Bella 603843907

Andressa Bella, brasileña independiente.

Andressa me llamó la atención cuando Blanca Palacios (ex jefa de las añoradas Perlas de Blanca) en su estado de whatsapp anunció que estaría disponible algún día de Semana Santa su amiga brasileña. Si Blanca la recomendaba pensé que tenía que ser una buena compañía. Y lo fue, aunque unos días más tarde cuando vi que se anunciaba en el foro.

-Fecha: Mediados de abril de 2023.
-Nombre de la acompañante: Andressa Bella. Teléfono de contacto 603843907.
Más información y actualizaciones en su hilo
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Recibe en un apartamento junto a la Plaza de Castilla que creo que lo comparte con alguna chica más que no sé a qué se dedicará, tampoco se la sintió. Zona verde de aparcamiento aunque creo que en el mismo edificio hay un parking público. Todo limpio y en orden. Colutorio y desodorante a disposición de los clientes.
-Nacionalidad: Brasileña.
-Edad: Dice tener 30 años. Cuando una mujer (y más en este sector) dice su edad ya sabes, añade alguno más, pocos en este caso, creo yo.
-Tarifa: Fui en plena "oferta de lanzamiento". Me cobró 180 € por una hora aunque desde el principio dijo que su precio, pasado ese periodo, es de 200 €. El griego lo cobra a 100 € más. Ir allí y no follarse ese culo es pecado.
-Higiene: Me duché yo solo antes y tras la cita pero Andressa estaba completamente limpia.
-Descripción de Andressa: La verdad es que me parece una chica bastante guapa de cara (las fotos son completamente fieles a la realidad). Lleva el pelo largo y teñido de rubio. Estaba algo maquillada en cara y ojos, muy poco. La manicura perfecta con uñas pintadas y cortas. Sin pendientes en orejas pero sí con anillos en dedos y pulsera en muñeca.
Pero eso son menudencias, lo importante es el cuerpo serrano que se gasta esta hembra. Es el típico cuerpo brasileño con el que soñamos disfrutar algún día cuando vemos a sus paisanas por la calle o televisión. De estatura rondará 1,65 metros, pero tiene un culazo de los mejores que he catado, redondito, carnoso, respingón y de talla media tirando a grandecillo.
La cintura, en contraste, es estrecha y es dueña de un par de tetas grandes operadas a las que se les nota las cicatrices bastante notorias, aunque lo disimula mucho la propia caída de los pechos. De hecho yo lo vi cuando alcé la vista mientras la comía la almeja.
Andressa es de carácter siempre amable y agradable y se está muy agusto en su compañía.
En cuanto al idioma, no habla un español muy fluido pero se hace entender bastante bien, no hay problemas en ese aspecto. Además el sexo, como la música, es un idioma universal.
-Nota del cuerpo: 9,5/10.
-Besos: Con lengua. No los busca ella pero tampoco los rechaza.
-Francés natural: Lo practica correctamente aunque no muy profundo porque no le cabe, no le da más de sí la boca.
-Griego: Espectacular. Son 100 € de extra y creo que lo hace dependiendo del tamaño. En mi caso, como es tamaño" dentro de la media", no hubo problema.
-Piercings/Tatuajes: Creo que no llevaba ninguna de las dos cosas.
-Implicación: Muy buena. Si la sabes calentar es cañera. 9,5/10.
-Lo mejor: El cuerpazo que tiene Andressa, lo buena que está y el griego que ofrece.
-Lo peor: Las tetas operadas, un mal menor para mí.
-¿Repetir?: Tajantemente sí.
-¿Recomendable?: Por supuesto. Si te gusta un cuerpo típico de brasileña lo vas a disfrutar y si además te gusta el griego, ni te cuento.
-Nota global de la experiencia: 9/10.


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Quedé con Andressa vía whatsapp. Contestó a mis preguntas rápidamente y acordamos una cita.
Cuando me abrió la puerta vi a una chica bastante guapa, nos dimos dos besos (en Brasil me dijo que sólo se da uno) y nos fuimos a su habitación.
Me duché a solas y volví al dormitorio donde me encontré a Andressa aún completamente vestida. Se levantó, me preguntó qué me gustaba (la dije que todo) y me invitó a que la ayudara a desnudarse. Primero tiré de sus pantalones hacia abajo hasta quitárselos. No llevaba nada debajo y no pude evitar besar, lamer, chupar y comerme ese par de glúteos espectaculares de la brasileña. la cosa fue a más y pasé a lamer y meter la lengua por su ano limpio.
Me incorporé y la terminé de desnudar hasta tener en mis manos y cara un par de tetas grandes a las que también tuve que cumplimentar y saludar con besos, chupeteos o pequeños mordisquillos tan suaves como inocentes.
Por fin nos tumbamos en la cama y me comí su coño, excitando su clítoris y metiendo un dedo en su vagina el cual movía suavemente.
Cambiamos de roles y me la empezó a chupar en un francés natural correcto, sin más, pero lo hace bien a grandes rasgos. Me salí de la cama y me puse de pie junto a un espejo que hay en un rincón del dormitorio y la pedí que se arrodillara frente a mí y me la siguiera chupando. Andressa accedió complaciente y disfruté de lo lindo con esa imagen que me ofrecía el espejo en la que una estupenda hembra me devoraba la verga. Imágenes para el recuerdo, sin duda.
De vuelta en la cama hicimos un 69. En el fragor de la batalla Andressa se calentó y empezó a hacerme una especie de twerking suave en la cara. Creo que si no se corrió, cerca anduvo.
Decidimos que ya era hora de follar y la posición que más disfruté fue en la que me cabalgó dejándome sus tetas grandes en la cara para que se las comiese a la vez que la agarraba fuertemente de sus hermosos glúteos.
Después lo hicimos en otras posiciones como el tradicional misionero, la cuchara o de costado, pero vi que estaba aguantando todo sobradamente al haber acudido a la cita muy descargado por lo que podría aguantar una sesión de griego (100 € extra). Andressa me lo había ofrecido después de ver que no tengo un miembro descomunal, así que allá que fuimos.
Me pareció que tiene un ano muy estrechito, casi podría decir que más de lo normal. A pesar de haberse echado lubricante me entró la polla muy justita, lo que acrecienta el placer. Dejé que esa primera penetración anal fuera cabalgándome para que Andressa controlara a su gusto hasta que el ano dilatara. Una vez hecho esto empezó a cablgarme cada vez más y más deprisa hasta llegar al punto de que parecía una penetración vaginal por el ritmo que llevaba. Yo me sentía en la gloria y aguantaba bien mientras Andressa me confesó que los orgasmos más intensos y profundos que experimenta son los anales, así fue calentándose la cosa hasta que terminó por correrse.
Y para finalizar, porque el tiempo ya se estaba cumpliendo aunque Andressa en ningún momento me dijo nada, decidí encularla a cuatro patas donde di todo lo que tenía durante algunos minutos y a un ritmo bastante fuerte. Andressa decía que se venía nuevamente y que nos corriésemos los dos a la vez pero no pudo ser, yo me corrí antes, no pude aguantar más.
La verdad es que acabé la cita cansado, fue un polvo buenísimo y sin tregua, pero me marché de aquel apartamento confiando en volver no dentro de mucho tiempo porque lo pasé genial con una chica con un cuerpo precioso.


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No hay nostalgias como las de antes