Iniciado por balaplata (Mensaje 1800778) ya no tiene amigas,no? recuerdo que antes eran 3... podeis alguno confirmar? sds

Iniciado por javier75 (Mensaje 1831970) Alguien estuvo recientemente con ella? En sus ultimas fotos parece mas delgada y atractiva... hay ganas de ir a verla pero con tantos comentarios contradictorios no se que hacer..

Iniciado por deutsch (Mensaje 1832238) Alguno ha estado o hay hilo de experiencias de Raquel y Lucía? Tienen muy buena pinta también las que están con Silvia Gracias

Iniciado por casaniva (Mensaje 1833376) Tengo una pregunta hay post que dicen que Silvia pesa cerca de 90kg.eso es mucho para una mujer aunque seas grande, alguien que haya estado recientemente con ella nos puede sacar de dudas y especificarnos como está actualmente, en las fotos parece que está delgada.

Echar un vistazo a las votaciones de los premios Spalumi es siempre una buena idea para descubrir nuevas chicas. Al estar las votaciones organizadas por servicios y tipo de profesional es muy fácil ver lo que hay según tus preferencias, y cómo se supone que todos honestamente votamos lo mejor que nos hemos encontrado en el año en cada especialidad es muy fácil descubrir buenas profesionales, vas directamente al hilo de experiencias y después de leer unas cuantas sacas tus propias conclusiones. De ahí a buscar el hilo de la profesional donde simplemente viendo qué y cómo la profesional se expresa se puede sacar un idea de lo que te vas a encontrar. Nunca estaré lo bastante agradecido al foro y a los foreros que escriben sus experiencias, que me ha proporcionado tantos buenos ratos desde que lo descubrí.
Revisando las de este año descubrí a Silvia, leí varios posts de experiencias, revisé su hilo de profesional y me gustó lo que vi. Sin perder tiempo me puse en contacto con ella por whatsapp, cosa que fue extremadamente fácil y a pesar de hacerlo fuera de su horario habitual me contestó en cuanto pudo muy amablemente. Concertamos la cita sin problemas y ya detecté su profesionalidad y seriedad en esta parte de la relación. Nada más abrirme la puerta y tras la impresión de encontrarme ante una mujer guapa, bajo mi punto de vista muy guapa, me di cuenta que íbamos a conectar y que había hecho un descubrimiento.
Me recibió con un vestido que no recuerdo muy bien porque la primera visión de Silvia me nubló algo la vista y bastante el intelecto, con una enorme, juvenil y sincera sonrisa, afirmada su sinceridad con los ojos porque esta mujer sonríe con la boca y con los ojos, durante todo el tiempo, a veces con cierta picardía y siempre transmitiendo una gran alegría. Silvia es alta, rubia, con una larga melena que usa como arma de seducción y placer en sus juegos sexuales, con una sonrisa que ya he comentado, de cuerpo grande, ojo!!! no pasada de peso ni mucho menos, pero con curvas de las que disfrutar, con una piel muy suave que da un enorme placer acariciar, pechos abundantes y deliciosos, pezones erectos pero pequeños que puedes estar chupando, besando y lamiendo una eternidad, buenos muslos y buen culo, en fin, bajo mi punto de vista un "peazo mujer" como diría un castizo. La habitación donde recibe es grande, con una gran cama, una camilla y un sillón tántrico mueble éste que no lo encuentras frecuentemente y a mí personalmente me parece una herramienta fundamental para el sexo ya que ofrece mil y unas posibilidades de practicar montones de posturas cómodamente sin el peligro de partirse la crisma cuando lo intentas sin él. Creo recordar también que tiene un pequeño frigorífico del que te ofrece bebida nada más llegar, una bicicleta estática que claramente usa porque se la ve muy en forma para la edad que confiesa, 41. Me ofreció sentarme en la cama y charlamos un rato, ella te hace sentir desde el primer momento a gusto, cómodo, como si te conociera de siempre y siempre transmitiendo una alegría y jovialidad enormes. Tras la pequeña charla me preguntó si quería pasar por el baño, cosa que siempre hago aunque vaya recién duchado. Por poner algo negativo el tránsito por el pasillo en paños menores resulta un poco frio, no hay radiadores en él. De todas maneras como vas caliente al principio del encuentro y en ignición al final tampoco representa mucho problema.
Y voy con el relato del tema central:

Al volver del baño Silvia estaba esperándome en el pasillo con un medio body de malla que solo le cubría de la cintura para arriba, dejando ver los pechos, con los pezones sobresaliendo de la malla y el pubis al aire, unos ligueros que sujetaban las medias hasta medio muslo y zapatos de tacón. Pasamos a la habitación y no pude resistirme a acariciar sus pechos por encima del body, pasar la lengua por sus pezones con una mano en un pecho y la otra en la entrepierna, con ella apoyada en el borde de la camilla. Me decía que le encantaba que le lamiera los pezones lo que me animaba a seguir, subiendo a veces lentamente a su cuello para besarla, dándole ligeros besos en los labio o frotando nuestra lenguas mientras ella acariciaba mi polla iniciando un ligero y suave movimiento de vaivén. Mis dedos empezaron a acariciar suavemente su clítoris y todo esto parecía disfrutarlo tanto como yo porque enseguida pude notar su humedad en la yema de mis dedos. Ella siempre con esa sonrisa en sus labios y en sus ojos, gimiendo a veces..... me dijo que pasáramos a la cama y me tumbara boca abajo porque si no íbamos a ir demasiado rápidos al "tema".
Dicho y hecho. Me tumbé boca abajo y empezó su juego con el pelo, los pechos y las manos, hacía deslizar su melena por mi culo y espalda, alternado con sus tetas cuyos pezones duros notaba en las nalgas, en la hendidura entre las nalgas, en la espalda, notaba su mano acariciando mis muslos, a veces pasando los dedos por el perineo, atreviéndose cada vez más y más a explorar los alrededores del ano, volviendo de nuevo a los pases de su melena por las nalgas y de nuevo a las exploraciones más atrevidas, notaba su lengua por mi culo.... en un momento dado vi que tenía algo en la mano y después comprobé que debía ser un preservativo que puso en su dedo para, mientras sus dedos estaban ya en la abertura de ano, pedirme permiso con un susurrado "puedo?", "adelante" contesté, soy un hombre fácil y si una mujer me pide algo así con tanta delicadeza y educación no me sé negar. Suavemente me introdujo su dedo mientras seguía acariciando mis nalgas y le debía excitar porque iba aumentando el ritmo de su respiración, gemía y profundizaba y presionaba con su dedo..... Finalmente se retiró y creí que había llegado el momento de dedicarme a su placer. Le pedí que se tumbara para corresponder sus atenciones, bajándole el body primero y finalmente quitándoselo dediqué un buen rato a besar, lamer y besuquear sus pezones agarrando sus tetas con las manos, ella gimiendo, lo que me animaba a seguir con el juego y me animaba y excitaba para ir bajando por su vientre hasta llegar a su clítoris que empecé a lamer suavemente, pasando mi lengua por los labios vaginales, introduciendo la lengua, alternando leves lamidos con succiones del clítoris mientras mis manos separaban los labios, masajeaba sus tetas o se agarraban a sus caderas y culo para empujar su coño contra mi boca. Esto parecía gustarle mucho porque me animaba, me pedía que no parase, gemía y finalmente me anunciaba su orgasmo, seguí hasta que me pidió que parara porque tenía el clítoris muy sensible.
Como siempre, con su sonrisa encantadora me dijo que era su turno, me pidió que me tumbara boca arriba y empezó su juego con la melena, los pechos y las manos esta vez por mi parte delantera, deslizándose sobre mi torso y poco a poco concentrarse en los alrededores de la polla que tras un rato de juegos se introdujo en la boca y comenzó un largo y húmedo francés que me pareció de los mejores que he experimentado, ayudándose de la mano lo imprescindible y eso sí, avisándome previamente que no lo hacía hasta el final. A veces le apartaba la melena para poder ver como la polla entraba y salía en su cálida y húmeda boca, a veces le cogía la cabeza para metérsela hasta el fondo o cambiar el ritmo. Como no quería terminar sin probar las posibilidades del sillón y sin estar dentro de ella le pedí que pasáramos a follar, me puso un preservativo le dije que se apoyara en la parte alta del sillón para de pie tras ella metérsela por detrás, posición que me gusta mucho más que el A4 de rodillas en la cama porque me permite más control y puedes variar la altura del culo para introducirla más profundamente. Que gozada estar tras ella bombeando agarrado a sus nalgas y caderas mientras me pedía más, que no parase, que se la metiera toda, cambiando de ritmo, acelerado y profundo o despacio sacándola casi completamente y volviéndola a meter solo ligeramente. Pasamos a otra postura, sentado en la parte baja del sillón y ella a horcajadas sobre mí para cabalgarme a su placer, saltando arriba y abajo o sentada completamente sobre mi pubis mientras se movía adelanta y atrás con la polla totalmente enterrada en su coño......ella diciéndome cosas, "quiero tu leche dentro de mí, quiero sentir el calor de tu corrida" y yo con el sentido perdido solo pudiendo decir: joder!, jode!, joder!......Ni que decir tiene que todo aguante tiene un límite y al borde de la demencia me corrí como un bendito. Sin perder la posición estuvimos después un rato charlando mientras yo acariciaba sus muslo y ella jugueteaba con su dedos por mi pubis.
En resumen, una sesión extremadamente placentera, tanto sexualmente como por sentirme tan a gusto desde el principio. Lo mejor su implicación, su empatía, su naturalidad, su alegría, da gusto practicar sexo cuando se hace tan divertido y te están sonriendo todo el tiempo. Lo peor, que me ha creado adición.........pero la vida son dos días y hay que vivirla a tope, bendita adición.