Los antiputeros hacen unos análisis muy minimalistas del tipo "con una puta solo estás un ratito, echas un polvo y te cuesta 80 euros. Con una novia estás una noche entera y echas tres gratis".
Comparan un polvo, una noche, una experiencia. No tienen visión de largo alcance.
No se dan cuenta de que ser putero es algo más profundo y constante, es un estilo de vida. Un putero, en una década, entre sus 27 y sus 37 años de edad, a un modesto ritmo de una experiencia cada tres semanas acaba acumulando unas 170 experiencias. Si no repite demasiado es fácil que lo haya hecho con más de 80 mujeres. La mayoria con un mínimo atractivo o al menos de su gusto: muchas rubias si le gustan rubias, muchas altas si le gustan altas, tetonas o culonas según prefiera...Y todas esas experiencias si ir a ver pelis o conciertos que no te interesen, sin reuniones con los padres, sin llevar bolsas en el centro comercial, sin esperar retrasos, sin discusiones y sin celos. Todo eso es imposible sin pagar aunque seas el tio más atractivo del mundo. Y ni siquiera cuesta mucho, es más barato que cualquier divorcio.
|