632322598 / 633717426 Masajes eróticos en Dña carlota vallecas
Buenas,
Con este teléfono se están anunciando 4 chicas que ofrecen "masajes". Os cuento lo que os podéis encontrar los intrépidos que os atreváis a ir:
-Las fotos de los anuncios y las chicas que hay no tienen absolutamente nada que ver con la realidad. Todas las que hay tienen mucho sobrepeso.
-La que aparentemente coge las citas, es una borde además de estúpida.
-La ducha da asco de la cantidad de pelos que tiene y se encharca.
-El masaje es un pasa manos y el francés prometido es un par de chupaditas y luego mucho manubrio mal orquestado.
El enlace de uno de sus muchos anuncios: [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]
Avisados estáis!
Los siguientes 6 Usuarios dan las gracias a quemachichis por este Post:
Después de mucho tiempo, libre de ataduras sentimentales vuelvo por este foro a contar alguna experiencia reciente. Ahora, algo más viejo, más pellejo y más vago. Vamos, que prefiero un buen encuentro tranquilo y menos folleteo rápido y cañero.
(a ver si recuerdo como se posteaba... )
Una de mis escapadas buscando un buen masaje lingham en condiciones (todavía sigo a la busca), en junio fui a esta casita de Aluche. Me motivó una jovencita negrita africana de buen culo con la que contacté por Whatsapp y me confirmó las fotos y precios.
La casa está un poco escondida del número indicado, queda como por detrás y no es un piso sino una de esas casitas con entrada directa de la calle, de fachada rojiza y puerta blanca, en un rincón de una plazoleta (un poco indiscreto, tal vez a algunas horas).
Fecha aproximada: Hace unas semanas
Nombre: Diana, creo que me dijo
Nacionalidad: Muy afro
Edad: 21 añitos (muy creíble)
Contacto: 603318713
Anuncio : [Sólo los usuarios registrados pueden ver los enlaces e imágenes. ]
Lugar: c/ Seseña
Instalaciones: futón con sábana desechable en una sala un tanto desangelada separada del pasillo por cortina (no me mola nada), iluminada con una lámpara led redonda tipo youtuber
Higiene: bien
Cara: maja, facciones muy negroides
Pelo: trencitas afro, recogidas
Cuerpo: bien proporcionado sin ser cañón, 1,70-1,75 m.
Pecho: Pequeño, muy teen
Culo: grande sin exceso y duro
Piercings y tattos: creo que no
Actitud: amable
Conversación: poca pero agradable
Besos: No da, me regalo un par de picos al insistir
Fuma: No creo
Francés: ---
Forniqueo: ---
Griego:---
Lo mejor? Ganas de agradar, natural y sensual
Lo peor: la habitación desangelada
¿Repetir? Posiblemente si hay "margen de maniobra"
Tras encontar la casa me recibe una chiquita negra, maja en general, muy natural, veintipocos años y alta, como de andar por casa con vestido veraniego elástico en un salón corriente con su sofá, su tv... Tras la presentación bajamos unas escaleras muy empinadas (ella delante muy aprisa) y llegamos a una sala tras una cortina. Me pregunta si me ducho, ya venía duchado, y me pregunta si querré prostático (mejor masaje sensual y lingham). Le pago lo acordado, 60 euros/hora.
Mientras me acomodo/despeloto en el futón ella vuelve ya desnuda, me indica que me tumbe boca abajo y me pregunta si tengo cosquillas en los pies. Empieza masajes por todas las extremidades inferiores, con aceite, mucho aceite, cada vez subiendo más y aproximandose con toques a mi soldadito, con quien va cogiendo confianza y que se comienza a animar. Pero vuelve otra vez a la parte de las pantorrilas y pies, que frota con su pecho y vuelta a subir, y toques cada vez menos sutiles.
Comienza una parte muy sensual al masajear ya las nalgas y la espalda con lentitud y firmeza, se aproxima tanto a mi oreja y da algunos besitos en la cara, deja oir su respiración de lo más sensual. A veces incluso se queda tumbada del todo sobre mi espalda. A la segunda vez estoy con unas ganas tremendas de darme la vuelta pero voy a portarme bien y dejarme llevar, literalmente. Repite varias veces más el ciclo.
Cuando me indica que me de la vuelta la cosa está bien animada y, aunque está un poco a contraluz, disfruto de una esplendida vista con mi miembro a tope y ella de fondo mirándome dispuesta a seguir.
Se tumba a mi lado, me hace algún comentario amable sobre lo respetuoso que me muestro, le pido algún beso (me "regala" un par de picos) y le pregunto si la puedo meter los dedos. La respuesta fue "claro" a lo que accedí a su pubis todo lo que pude en esa postura porque ella estaba ya liada con un manual suave pero agradable (poco lingham) y que fue acelerando a la vez que yo aceleraba hasta que me corrí como un bendito. Luego me ayudó a limpiarme un buen rato antes de mandarme a la ducha dándome una toalla. También le dije medio sonriendo que si nos duchábamos juntos a lo que rauda contestó que no.
El baño un poco desastre pero amplio, sin cortinas ni mampara en el plato de ducha. Me vestí y al salir me esperaba, aún desnuda para acompañarme a la planta de arriba, subiendo los escalones de dos en dos (las vistas desde atras de ese culo no están pagadas).
La verdad es que para dejarse mimar un rato está bien por ese precio casi inigualable. Me gustaría saber si, debido a mi actitud pasiva, me perdí disfrutar aún más.
__________________ Un admirador, un esclavo, un amigo, un siervo (J.L. López Vázquez)
Animado por lo grato del primer encuentro, por la cercanía del lugar y siguiendo este I+D, a finales de julio quedé con esta chiquilla negrita (juraría que me dijo Diana su nombre pero los anuncios pone Sara) esta vez con ganas de final en sexo. Por cierto, recibe en c/ Tembleque, no sé por qué siempre me lío con las calles de Aluche.
El encuentro fue similar, 20 euros más caro por la terminación, y la chica me recordó con simpatía al verme llegar. En la sala donde entré ahora no había futón y sí un somier con cama grande. Esta vez sí recuerdo que se colocó un gorro como de ducha, negro, que no se quitó en todo el tiempo.
La primera parte, el masaje, fue igual que el primer encuentro. Masaje suave y placentero para evadirse. Fue por iniciativa de ella quien me recordó que había contratado sexo cuando pasamos al lío. Aquí vino la decepción, se dejaba hacer y con ganas de agradar pero había poca implicación. Si a eso le sumamos el exceso de aceite que aún había en nuestros cuerpos, pues no había posibilidad de mucho meneo ni caricias. Besos, ya lo tenía claro, tampoco salvo algún pico sutil.
Esta vez sí que hubo ducha conjunta pero sólo eso, ducha para eliminar el aceite, con confianza pero sin ese punto diferencial que nos gusta. Al subir había otra compañera, muy normalita (nunca llamo orco a ninguna mujer), a la que me presentó y despedida hasta la próxima.
Cuando salí, momento de mal rollo: la puerta contigua estaba entreabierta y los vecinos, que estaban viendo la tele, también controlan la calle.
En resumen, sitio para ir a relajarse, mejor para un masaje económico sin complicaciones si te viene bien la zona y cuidado con según qué horario.
__________________ Un admirador, un esclavo, un amigo, un siervo (J.L. López Vázquez)
Última edición por Lobo Tomy; 11-08-2022 a las 09:44
Razón: Correciones puntuales